Descubre cómo los tres niveles del diseño emocional son un facilitador para la experiencia de usuario, además conoce como estos moldean conexiones duraderas entre productos y usuarios.
La experiencia de usuario tiene varios pilares y uno de ellos es el diseño emocional. Donald Norman, psicólogo e investigador, acuñó el concepto y explica que su principal objetivo es hacer nuestra vida más placentera con diseños que evocan sensaciones positivas y ofrecen estímulos que provocan una respuesta emocional.
La pieza tiene que ser agradable o útil, además esta tiene que ir más allá e inspirar al cliente cuando la vea. Norman plantea que este tipo de herramienta debe ofrecer una gran experiencia, ya que no solo tiene que “entrar por los ojos”.
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La publicación debe tener coherencia emocional en todos los aspectos de un producto o servicio, desde su apariencia visual hasta su tono de voz en la comunicación y la experiencia general. Todo debe sentirse uno, para evitar alguna ruptura en la experiencia de usuario.
Para conseguirlo es indispensable aprender a descifrar las necesidades emocionales de tu audiencia, especialmente esas con el potencial de llevar a la acción. Los diseñadores emocionales tienen que esforzarse por comprender y empatizar con las necesidades, deseos y sentimientos de los usuarios. Esto se logra a través de:
1. El diseño visceral: Desde la experiencia de usuario
Hace referencia a un nivel preconsciente, lo que sería algo así como la “primera impresión”, que muchas veces no podemos explicar. Esto se refiere a lo importante de crear un primer impacto, de cómo se puede dejar esa primera huella inconsciente del producto.
2.El diseño conductual: La coreografía funcional que transforma la interacción
Este es un proceso que ocurre de manera completamente inconsciente y es uno de los niveles más responsables de las decisiones que tomamos todos los días. El nivel conductual está altamente relacionado con el nivel de comodidad de uso que proporciona el producto. Ese es el placer que siente la gente al usarlo.
Sin embargo, no se refiere solo de facilidad de uso, este nivel también se trata del placer de poder realizar tareas o acciones sin ninguna dificultad. Por lo tanto, el diseño conductual se trata de sentir que tenemos el control.
3. El diseño reflexivo: Espejo de memorias y forjador de identidades emocionales
Por último, el más abstracto de los tres. Se refiere a la imagen de uno mismo, a la satisfacción personal y a los recuerdos. Es un nivel atemporal, ya que la reflexión puede hacer referencia tanto al pasado como al futuro.
La importancia del diseño emocional en la experiencia del usuario radica en su capacidad de trascender lo meramente visual o la funcionalidad de una pieza. Por consiguiente, se construyen experiencias significativas y duraderas que .
comprenden y satisfacen las necesidades emocionales de sus usuarios, desde la primera impresión, hasta la conexión con tus recuerdos y satisfacción personal.
La coherencia en todos los niveles, desde el visceral hasta el reflexivo, crea una interacción fuerte y completa entre el producto y el usuario, formando así una conexión emocional duradera en la mente del consumidor.
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